“That is the question”, no os podeis imaginar la cantidad de correos que me llegan haciéndome la misma pregunta y me gustaría dejar mi humilde opinión al respecto.
Sumisas existen, lógicamente hay muy pocas que vayan con un letrero en el pecho diciéndolo, en las webs especializadas BDSM se encuentran, pocas eso sí, pero existen, aunque debéis entender que vayan con mucho tacto a la hora de anunciarlo a los cuatro vientos.
Para mí el problema somos nosotros, los Amos, y os daré mi punto de vista. Mi amplia experiencia me ha dejado entender cual es el motivo. Sabéis que mi sumisa y yo mismo realizábamos sesiones de exhibición, nuestra idea inicial no era otra que hacer vivir a quien nunca lo ha vivido en directo, cómo es una sesión BDSM, todo el ritual, los comportamientos, y cómo no, el juego en sí. Nuestro enfoque siempre ha sido BDSM y lo sigue siendo lógicamente, pero el hombre es hombre y si bien, no todos somos iguales, nuestro instinto siempre nos traiciona, ¿por qué os digo esto? pues porque en gran parte de las sesiones siempre se buscan las connotaciones sexuales, algo lógico, pero que no sabemos manejar.
Recibo muchísimas llamadas que tendría que grabarlas para reproducirlas… que si me la podré follar, si le podré dar por culo, si le podré meter el puño, si le puedo pegar y correrme en su boca, vamos… para flipar, (cosas por las cuales dejamos de hacer esas sesiones de exhibición), para decirles cosas que por decoro y buen estar no puedo reproducir, y a eso amigos, es a lo que tienen miedo las sumisas.
En todos mis años de experiencia en el BDSM y os aseguro que no son pocos, nunca, nunca le he hecho a una sumisa nada que no pida ella, que no se pacte antes, aun sin conocerla de tiempo, en las sesiones contratadas, siempre han salido felices de experimentar un mundo nuevo de sensaciones, pero siempre pensando en ellas.
Fijaros lo sencillo que es, respeto y quererlas, pensad que sin ellas nosotros los Amos no existiríamos. Ser un buen Amo, no es ser un “machote” es saber hacer feliz a una sumisa para que ella nos haga felices.
Yo siempre digo que el BDSM es como hacer un arroz, la parte sumisa te da dos igredientes y tú los cocinas a tu gusto, fijaros qué sencillo que es.
Para encontrar una sumisa de “alma sumisa” y no hablo de ser sumisa sexualmente, hay que buscar a la persona, abrirnos a ella y dejar que su sentimiento sumiso fluya, es laborioso claro que sí, pero sin duda, si conectas con su alma, nunca podrá romperse ese vínculo. Si por el contrario solamente buscas el placer de “atizar” y causar dolor sin pensar en ellas, fracasarás.
Me llegan muchos correos de sumisas buscando Amo, y ese miedo a qué se encontrarán, ese terror por llevar el título de sumisa y que creen que otorga carta blanca a la parte dominante. Yo siempre les digo lo mismo, yo me fío de mí y nunca recomendaré a nadie, al menos que lo forme yo y le conozca muy bien.
Un último consejo, no vayáis de “masters” en las redes sociales o los chats, mostraros como personas, ese es el camino para que una “alma sumisa” deposite en vosotros la confianza para llegar a ser su Amo absoluto.
Leed, documentaros, si podéis asistir a un taller mejor, veréis que es sencillo, pensad también que si difícil es encontarla, más difícil es aún mantenerla.
Mucha suerte!!
Dhanko