Una afirmación que ahora entenderéis.
Ayer me llamó Carme, una chica de cuarenta y siete años, separada y de Barcelona, se presento como una mujer a la que siempre le han atraído los juegos D/s pero que nunca los había practicado. Descubrió mi blog en Twitter hace varios meses y me sigue desde entonces.
Como siempre y para que se sintiera tranquila, hablamos un poquito de cosas banales y le pregunté que tipo de sesión quería realizar, yo le recomendé una sesión de iniciación para que pudiera experimentar un poco de todo dentro de las prácticas que ella quisiera probar y mi sorpresa y grande, fue cuando me pidió un masaje BDSM, me quede a cuadros, la primera vez que oía ese término, así que le pedí que me explicara que entendía ella por un tipo de sesión como la que me solicitaba, me dijo que quería sentir mi dominación teniéndola atada y a mi disposición, que podía realizar algunas prácticas con ella en esa posición pero que quería sentir la caricia del masaje dentro de la misma sesión, sentía temor por lo que conocía del BDSM y de este modo camuflaría su miedo a ciertas practicas ya que por otro lado sentía plena confianza en mi como dominante, cosa que le agradecí sin duda.
Le argumente que dentro del tipo de sesiones hay una que practico bastante, se trata de la sesión de provocar y negar, la llamada Tease & Denial, una practica muy usada por Dominas profesionales y que realmente debo decir que realizo muy bien. Le argumente que si realmente lo que quería era algo sumamente suave y erótico podríamos empezar por ese tipo de sesión. Así finalizó la conversación, me dijo que me llamaría cuando pudiera cuadrar su agenda y quedo todo perfecto.
Al rato me volvió a llamar y me pidió hora para esa misma tarde, le comente que tenia un taller hasta las 19 pero luego (aun estando fuera de horario) era posible, así que le dije que si, que nos veríamos a esa hora, le pregunte si haríamos ese tipo de sesión y me dijo que si, pero que hablaríamos cuando estuviera aquí.
A las 19,10 se presento, estuvimos hablando durante casi 30 minutos, y después de realizar el test, me volvió a pedir el masaje BDSM. Lógicamente yo le pedí que entendiera que ese tipo de práctica se escapaba un poco de mi concepto de sesión, pero después de su insistencia le dije, venga probemos, le remarque que iría alternando diferentes practicas con el masaje en si, lo acepto y después de unos diez minutos de juego para entrar en los roles, la ate a la mesa especial que tengo para las practicas (en realidad es como una camilla por sus dimensiones), le tape los ojos, cogí el aceite que tengo para uso privado y empezamos «la sesión».
Debo decir que aunque estoy acostumbrado a realizar masajes en mi vida privada nunca lo había realizado con nadie que no fuera mi mujer, así que me sentía un tanto desorientado.
Después de realizar el masaje trasero con el aceite de romero y tenerla boca arriba, jugué con cera, con la espuela, con pinzas en sus pezones y vagina, todo ello alternando con los masajes y centrando gran parte del juego en su parte genital.
La hice llegar seis veces al límite del orgasmo, prohibiéndole que se corriera, su entrada en los conceptos BeDeSeMeros fue increíble, así que finalmente y después de más de una hora de masaje permití que se corriera.
Al finalizar la llamémosle «sesión» me aseguro que había sido la mejor experiencia de su vida, se ducho, nos tomamos un cafe, hablamos ampliamente de la «sesión» y se marchó.
Esta mañana me ha llamado y me ha vuelto a dar las gracias por permitirle vivir lo que ella buscaba, ya hemos quedado para la semana próxima realizar una sesión de iniciación correcta, ya que ahora no sentía ningún tipo de miedo y estaba totalmente abierta a vivir el juego BDSM de forma protocolaria y estandarizada, la pregunta es… ¿me dejará? ;-).
Debo decir, que vivir este tipo de cosas me hace pensar que podemos conseguir tantas cosas si nos lo proponemos, si las inventamos, es fascinante, ¿no creéis?
Bien, os he querido contar todo esto, algo surrealista porque como decía inicialmente el BDSM no deja de sorprenderme cada día. No deja de sorprenderme como las personas buscamos alicientes a todo, como realizamos búsquedas de placeres ocultos que habitualmente no tenemos.
Pero… ¿sabéis lo mejor?, me lo pasé de muerte, cansado si, pero satisfecho de ser capaz de transmitir el juego BDSM a un masaje y con ¡final feliz!
Fijaos en la sencillez de la práctica BDSM, estaréis cansados de oírme decir que el BDSM se puede jugar hasta tomando un cafe, y como digo… para muestra un botón.
Feliz dia amigos
Dhanko
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